
Terapia Emocional
El trabajo con las emociones ha acompañado a la humanidad desde siempre. En diversas tradiciones espirituales y de sanación, se reconoce que las emociones son energía en movimiento, y que su expresión consciente es clave para el bienestar integral.
En el siglo XX, el desarrollo de la psicología humanista, la terapia Gestalt, la bioenergética y los enfoques somáticos aportaron una comprensión más profunda de cómo las emociones impactan nuestro cuerpo, mente y espíritu.
Hoy, la terapia emocional integra estas corrientes y herramientas, ofreciendo un espacio de escucha y transformación emocional. Su propósito es ayudarnos a reconectar con nuestro sentir, comprender nuestros patrones emocionales y recuperar un estado de equilibrio y autenticidad.

¿En qué consiste?
La terapia emocional es un espacio terapéutico donde la persona puede explorar, comprender y transformar su mundo emocional. Su propósito es ayudar a identificar emociones reprimidas o no expresadas, comprender su origen, y aprender a gestionarlas de manera consciente.
A través de técnicas de diálogo terapéutico, conciencia corporal, trabajo respiratorio y herramientas de integración emocional, esta terapia facilita la liberación de tensiones internas y el fortalecimiento de la inteligencia emocional.
Sirve para gestionar el estrés, sanar heridas emocionales, mejorar la autoestima, resolver conflictos internos y recuperar una relación más saludable con las propias emociones, promoviendo así un mayor bienestar integral.